CANTARNOS LAS VERDADES: ¿Qué hubiera pensado «el Poeta del Pueblo» si hubiera vivido hasta hoy y pudiera constatar que vivimos en un mundo donde pronto podremos cantarnos muchas cosas, menos las verdades, porque ya nadie sabe lo que es VERDAD?

En plutocracias disfrazadas de democracia o estalinismos abarrotados de populismo barato, hemos vivido sometidos a la tiranía del Ministerio de la Verdad (George Orwell, «1984«), encargado de reescribir el pasado, mantener la ilusión de perfección en el presente y garantizar la continuidad de su control futuro, asegurándose de que su versión siempre sea la correcta, incluso si eso implica negar la realidad o basarse en «hechos alternativos» (perdónalos, Cervantes).

A todo el aparato muy bien engrasado durante décadas, ahora se suma la tiranía de los ALGORITMOS y los ejércitos o «granjas de TROLES» que abarrotan Internet con «webasura» y hacen inclinar la balanza de la opinión pública según el dinero que se vierta en las atascadas alcantarillas de las redes sociales.

Para muestra, dos botones:

1) La enorme manipulación al más alto nivel del caso del pedófilo Epstein y la desinformación sistemática a la que nos somete el actual desgobierno de los Estados Unidos; y

2) Un amigo me hizo llegar una intervención del Vicepresidente del Instituto de Información cubano diciendo que «la verdad necesita de nosotros«, cuando la realidad es totalmente otra: es un pueblo al que se le ha OCULTADO y DOSIFICADO durante décadas la información por los censores del Olimpo, el que NECESITA DE LA VERDAD tanto como de la luz, el agua, los alimentos, las medicinas y el transporte.

Claro, en el primer caso, la culpa es de los «comunistas» y «despiertos» que pretendemos dañar con difamaciones la grandeza del proyecto trumpista y, en el segundo caso, la culpa es del criminal Bloqueo y del enemigo que siempre está al acecho…

Nada, querido Benedetti, mejor seguimos cantando rancheras, porque LAS VERDADES brillan por su ausencia.  (Imagen original tomada del muro de mi amiga Marta Rojas).