Esta es la segunda crisis de Ucrania en menos de un año, ambas fabricadas contra Rusia. En marzo pasado, Estados Unidos anunció 125 millones de dólares más en ayuda militar a Ucrania, incluidas lanchas patrulleras y equipos de radar, y otro paquete de 150 millones de dólares en junio con radares, equipos de comunicaciones y de guerra electrónica para la Fuerza Aérea de Ucrania.
Este último paquete incluye el despliegue de personal de entrenamiento estadounidense en las bases aéreas ucranianas. Según los informes publicados, Turquía, otro estado de la OTAN, está suministrando a Ucrania los mismos drones que proporcionó a Azerbaiyán para su guerra con Armenia por el territorio en disputa de Nagorno-Karabaj en 2020.
En abril de 2021, el gobierno antirruso de Ucrania amenazó con una ofensiva contra las regiones orientales separatistas de habla rusa de Donetsk y Luhansk. Desde abril de 2021, la OTAN ha estado aumentando la presión militar sobre Rusia en la región. El verano de 2021 vio a 30,000 soldados participar en la Operación “Defender a Europa 2021”, un gigantesco conjunto de ejercicios militares liderados por Estados Unidos desde el Báltico hasta el Mar Negro, mientras que en diciembre Estados Unidos organizó bombardeos simulados dentro de las 12 millas del espacio aéreo ruso.
Según la propia OTAN, sus aviones de combate coincidieron en el aire con aviones rusos 290 veces en 2021, la mayoría de las veces a lo largo de las fronteras occidentales de Rusia. Significa que casi el 80 por ciento de las 370 misiones de vuelo de la OTAN este año involucraron potenciales enfrentamientos con la fuerza aérea rusa.
Como un acto de extrema agresividad anti – rusa, el líder de la oposición kazaja, Mukhtar Ablyazov (eufórico amante de la OTAN), lidera el intento de golpe en Kazajstán a través de su sede en Ucrania, evidenciando quienes están detrás de esta sangrienta conspiración. Kiev se ha convertido en madriguera de los elementos que perturban la paz y que tratan de crear el mayor caos posible en Asia Central, una suerte de Miami en el valle del Dniéper.
El 7 de diciembre de 2021, altos funcionarios del Departamento de Estado de los EE.UU. testificaron ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado (dirigido nada menos que por el feroz anticubano “Bob” Menéndez) que el gobierno de los Estados Unidos ha dado $ 2.4 mil millones a Ucrania desde 2014 «en asistencia de seguridad«, que incluyó $ 450 millones que se dieron solo en 2021.
Se trató hipócritamente de tranquilizar a Moscú que Estados Unidos y la OTAN todavía estaban comprometidos con los Acuerdos de Minsk de 2014-2015, que incluían la prohibición de operaciones militares ofensivas y la promesa de una mayor autonomía para Donetsk y Luhansk dentro de Ucrania. Pero sus garantías fueron deshechas por el secretario de Defensa Lloyd Austin cuando se reunió con el presidente de Ucrania, Zelensky, en Kiev en octubre, reiterando el apoyo de Estados Unidos a la futura membresía de Ucrania en la OTAN, prometiendo más apoyo militar y culpando a Rusia por «perpetuar la guerra en el este de Ucrania«.
Rusia está bien justificada al advertir que la política actual de Estados Unidos y la OTAN en Ucrania corre el riesgo de cruzar las «líneas rojas» de seguridad de Rusia, los hechos reales respaldan sus preocupaciones:
- Cada promesa de Estados Unidos y la OTAN de mantener a la OTAN alejada de las fronteras rusas se ha incumplido sistemáticamente durante treinta años.
- Consideremos el hecho de que desde los 1990’s, la OTAN, que no debería existir desde el fin del Pacto de Varsovia en 1991, se ha movido inexorablemente hacia el este. En 1990, con la reunificación alemana y la anexión de la RDA, toda Alemania se convirtió en parte de la OTAN. En 1999 la República Checa, Hungría y Polonia se unieron a la OTAN. En 2004 Estonia, Letonia, Lituania (todas las antiguas repúblicas soviéticas), Bulgaria, Rumania, Eslovaquia y Eslovenia se unieron a la OTAN. En 2009 Albania y Croacia se unieron a la OTAN. En 2017 Montenegro se unió a la OTAN. En 2020 Macedonia del Norte se unió a la OTAN.
La incorporación de Ucrania a la OTAN acercaría aún más las armas y tropas de la OTAN al corazón de Rusia. Esto no quiere decir nada del hecho de que, dentro de la memoria viva, el pueblo ruso sufrió la invasión de Occidente. En 1941-45 los ejércitos de Hitler (y sus aliados italianos, rumanos, húngaros, eslovacos, fineses y españoles), con millones de efectivos, devastaron el país en una guerra genocida que cobró más de 20 millones de vidas.
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Ucrania: Colusión de los Medios “Canallas” con el Complejo Militar Industrial (Parte I)
Ucrania: Colusión de los Medios “Canallas” con el Complejo Militar Industrial (Parte II)
Ucrania: Colusión de los Medios “Canallas” con el Complejo Militar Industrial (Parte IV)
Ucrania: Colusión de los Medios “Canallas” con el Complejo Militar Industrial (Parte V)
Ucrania: Colusión de los Medios “Canallas” con el Complejo Militar Industrial (Parte VI)