La disfunción eréctil siempre existió, solo que antes había más tapujos para hablar y reconocer si se padecía el problema. Hoy en día la disfunción eréctil como tema está presente en los medios de comunicación, se habla en los consultorios de sexólogos y psicólogos, se asiste a terapias de pareja, se consulta en los hospitales. Por suerte ha desaparecido el pudor y ya casi nadie se sonroja al decir que tiene alguna disfunción eréctil. Sin embargo, de acuerdo a diversos estudios se ha llegado a la conclusión de que la disfunción eréctil se ha incrementado al compás de los tiempos modernos.
¿Qué es lo que ha provocado que los hombres actuales padezcan con mayor asiduidad de disfunción eréctil? Justamente, la disfunción eréctil se ha incrementado debido a la contaminación del organismo, que también ha ido en aumento. El cuerpo está cada vez más intoxicado por químicos de todo tipo, a la vez que perjudicado por un estilo de vida que tiende al sedentarismo. Nos duele la cabeza y tomamos una píldora. Estamos a diez cuadras del trabajo y nos trasladamos en el auto por comodidad. Encargamos la comida rápida para evitar cocinar, sin reparar en la cantidad de grasas saturadas y aditivos con que castigamos al cuerpo.
Vamos a hacer las compras al supermercado y llenamos el carrito con los alimentos que lleven menos tiempo de elaboración, sin prestar atención a la cantidad excesiva de sodio y otras sustancias aditivas que contribuirán a intoxicarnos. En fin, creemos que nos hemos vuelto más libres por tener todo al alcance de la mano. Pero le hemos dado la espalda a la naturaleza y el cuerpo clama por ello.
Hay cambios en los hábitos cotidianos que pueden ayudar a revertir la disfunción eréctil. Son cambios que van a mejorar la performance sexual, a la vez que mejorarán la calidad de vida. Son cambios que agilizarán la mente y flexibilizarán el cuerpo. Son cambios que al fortificar el organismo pondrán una barrera inmunológica para alejar las enfermedades. Son cambios que ayudarán a conciliar el sueño y con ello a reparar las funciones orgánicas. Estos son algunos de los cambios fundamentales que hay que hacer si se quiere revertir la disfunción eréctil:
- Adherir a una dieta equilibrada, baja en grasas y en sodio, que permita tener un peso saludable acorde a la edad y a la talla.
- Practicar una actividad física al menos tres horas a la semana.
- Ejercitarse en yoga o alguna gimnasia que introduzca en sus rutinas ejercicios que tengan en cuenta la respiración profunda, la relajación y la concentración mental.
- Adherirse a terapias alternativas que resulten placenteras, disminuyan la tensión muscular y despejen la mente.
- No creer que los alimentos que se dicen afrodisíacos son los que potencian la virilidad. Hay determinados alimentos que SÍ potencian la virilidad porque son saludables, como las frutas y verduras frescas. Y hay que incorporar alimentos con ácidos grasos esenciales omega 3.
- Evitar los alimentos industrializados sin nutrientes, como las harinas blancas y el azúcar que está refinada.
- No fumar y beber alcohol en forma moderada.
- Eliminar el café y las bebidas con cafeína.
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