Me gustaría compartirles mi experiencia. Yo sé que si levanto mi voz con absoluta sinceridad, puedo ser útil a muchos hombres. Después de todo lo que yo mismo hube de pasar hasta encontrar la solución a mi problema de disfunción eréctil, no me gustaría que nadie tenga que transitar diversos caminos erróneos en busca de la solución.
Si hay un problema que golpea a los hombres en su orgullo, su dignidad, su razón de ser, es ESTE. Usted, yo y cualquiera que haya sufrido disfunción eréctil, sabe muy bien a lo que se puede llegar con tal de lograr la erección tan deseada. Ante todo, quiero decirle que no tiene que experimentar con químicos ni soluciones artificiales para lograr revertir su problema. Siga leyendo y lo conduciré a un sistema para combatir la disfunción eréctil que es único, efectivo y natural. (Y si usted es una mujer cuya pareja sufre de este problema, le aseguro que desde aquí podrá ayudarla).
Claro, el mejor comienzo es narrarle mis vivencias, para que si usted se siente identificado en algo con ella comience de inmediato su camino hacia la recuperación. Quiero ofrecerme como un espejo donde usted pueda mirarse, aunque no estoy dispuesto solo a contarle mi problema. Me propongo revelarle la manera que encontré de revertir mi disfunción eréctil, sin drogas sintéticas ni otros recursos invasivos y de consecuencias nefastas.
Era yo en aquel momento una persona treintañera, que estaba en la etapa más productiva de su vida. Luego de una carrera universitaria orientada al sector financiero, antes de los 25 años comencé a trabajar en una empresa multinacional. El ascenso fue rápido, aunque por cierto muy exigente.
Y de seguro que usted se estará preguntando, ¿y esto que tiene que ver con la disfunción sexual a la que apunté en un principio? Todo tiene que ver con todo, créame. Yo era un joven exitoso y proactivo en el trabajo, también era exitoso en el amor. No tenía una pareja estable pero no me costaba seducir chicas para vivir el placer sexual. No es por vanagloriarme pero mi fama de amante latino estaba en boca de ellas, para envidia de mis amigos. Entablé relaciones con mujeres vinculadas al trabajo y con tantas otras, con quienes tuve encuentros casuales. ¡Y nunca fallaba en la cama! A pesar de que el trabajo me exigía cada vez más energías, parecía como que eso me daba aún más impulso a la hora de los encuentros sexuales. ¡Mi autoestima estaba por las nubes!
En menos de una década logré el puesto máximo a que podía aspirar en la compañía. A la par, mi fama de buen amante no decaía. ¡Y a todos nos llega la hora de asumir un compromiso! Un buen día conocí a Muriel, una pasante que entró a la empresa cuando se graduó, con apenas 23 años. Realmente me impactó ni bien la vi y a ella le sucedió lo mismo conmigo, por lo que no tardamos en concretar una cita. Ambos éramos jóvenes y vitales, desde un comienzo de la relación disfrutamos del sexo al máximo. Aunque no necesitábamos condimentos para excitarnos, lo probábamos todo. Y lo que es muy importante, ¡yo nunca le fallaba en la cama!
Era tal la química que había entre nosotros que decidimos que ella se mudara a mi departamento de soltero. Como los dos trabajábamos mucho necesitábamos compartir más tiempo como pareja. Durante largo tiempo había sido cauteloso para aceptar la convivencia.
Disfrutaba de mi soltería y no quería que nadie invadiera todo mi tiempo libre. Pero con Muriel fue diferente desde un comienzo. Tuve necesidad de tenerla cerca y de amarla cada noche.
Cuando volvíamos juntos del trabajo no alcanzábamos a atravesar el umbral de la puerta de entrada y ya caíamos uno de brazos del otro. No podíamos parar de disfrutar del sexo, de esos momentos únicos de comunión que se dan cuando dos seres sienten la atracción en la piel.
A los pocos meses de estar viviendo en pareja mi responsabilidad en la empresa se incrementó todavía más. La compañía se había expandido hacia otras latitudes y yo debía viajar para contribuir al desarrollo de los nuevos asentamientos comerciales. Ya no podía tener con Muriel esos encuentros mágicos de todas las noches. Las relaciones sexuales forzosamente tendrían que espaciarse. A pesar de extrañarnos, pensamos que esta nueva etapa fortalecería la relación. Cada nuevo encuentro sería más excitante y compensaría con creces mis ausencias debido al trabajo.
Sucedió que el primer encuentro luego de no vernos por una semana fue decepcionante, como nunca antes había pasado. Por más que ella estuvo a la altura de las circunstancias e hizo todo lo que antes había comprobado que me podía motivar, esta vez no pude lograr la erección. Mis ganas se topaban con mi imposibilidad. Como acababa de aterrizar, literalmente era así porque hacía apenas una hora que había bajado del avión, pensamos que el estrés que traía del viaje se hacía sentir. Así fue que no le dimos importancia y nos dispusimos a descansar.
A la mañana estaba en mejor forma y puede responder al deseo como antes, aunque el período refractario para poder alcanzar una nueva erección se hizo esperar algunos días. Abreviando un poco mi relato, el episodio de la falta de erección no fue aislado sino que empezó a sucederse cada vez con mayor asiduidad. A veces no era porque venía de un viaje estresante sino que sucedía en un apacible día de descanso. Empecé a preocuparme. Ella me demostraba comprensión e intentaba convencerme de que pronto volvería a la normalidad.
Pero la comprensión de ella tuvo un límite, como no podía ser de otra manera. Al sentirse insatisfecha comenzó a mostrarme su malhumor, sus reproches por el tiempo que le dedicaba al trabajo no se hicieron esperar. Decidí consultar al médico. Sin embargo, los análisis de laboratorio y otros estudios no revelaron un problema en particular. El médico me recomendó que viviera el momento con menos ansiedad y que me ayudara con una pastillita, mientras la necesitara.
Así lo hice y empecé a tomar la pastillita una hora antes de tener relaciones sexuales. La desinhibición y espontaneidad con la que había seducido a mi pareja empezó a tener condicionamientos. Y lo que observaba era que ya no podía hacerlo sin la pastillita. No era que la pastillita me curaría de mi problema, sino que era una ayuda que no iba a poder abandonar si no tomaba otra determinación. Una ayuda que empezaba a transformarse en peligrosa. ¡Con solo leer la cantidad de efectos secundarios y contraindicaciones del prospecto ya sentía que estaba a punto de atraer alguna dolencia!
Hasta que en una de esas noches en que navegaba por internet, en cierta forma para evitar encontrarme en la cama con ella, vi un título que me llamó la atención: “Disfunción Nunca Más”. Tuve como un sexto sentido que me avisó que en esas páginas podía estar la solución a mi problema. No lo pensé demasiado, ¡qué podía perder con probar un método más! Por lo menos podía informarme, así que hice “click” de inmediato. Me encontré con un libro ameno y fácil de leer, que me invitaba a incursionar en soluciones naturales. Me fui anotando las primeras recomendaciones que pondría en práctica de inmediato. Así fue que no había transcurrido un mes cuando volví a ser el amante de antes, ¡y mejor aún! Muriel puede dar fe de ello, quien está al lado mío mientras escribo estas líneas y sonríe satisfecha.
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¿Qué es lo que tiene de convincente “Disfunción Nunca Más?
Indudablemente lo que tiene de convincente “Disfunción Nunca Más” es que está escrito por alguien que padeció el problema. El autor no es un teórico encerrado en su burbuja de conocimiento. El autor sufrió por un largo tiempo de disfunción eréctil, consultó a distintos profesionales de la medicina, probó varias drogas e incluso un dispositivo externo que se vende como una gran solución. A raíz de la ingesta de drogas y el uso del dispositivo de constricción al vacío, comenzó a sufrir molestias y hasta dolencias que antes no tenía. Así que se decidió a investigar el tema hasta agotarlo. Quería encontrar una solución a su problema de disfunción eréctil, pero una solución que no le afectara en nada su calidad de vida.
En síntesis, “Disfunción Nunca Más” es el resultado de un largo camino de investigación, estudio y experimentación.
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“Disfunción Nunca Más” da a conocer diversas sustancias naturales que ayudan a estimular la erección. Aporta terapias alternativas, como para que cada lector conozca en forma personal y elija la que mejor le sienta. Describe técnicas milenarias que provienen del yoga que son útiles para recuperar el vigor sexual. Y sobre todo se basa en cuestiones prácticas, muy útiles para concentrarse en el placer. Desde una mala alimentación a un estilo de vida sedentario, pueden jugarle en contra al deseo. Pueden perjudicar la excitación y la liberación de químicos para que el pene logre endurecerse, agrandarse y perdurar en ese estado todo lo que sea necesario.
¿Qué aporta de novedoso “Disfunción Nunca Más”?
El sistema para revertir la disfunción eréctil está explicado en forma clara y práctica, dos ingredientes que posibilitan que cualquiera pueda entender de qué se trata. Toma a la persona como una integridad física y psíquica, para después conducirla a tomar decisiones que le van a solucionar la disfunción sexual sin por ello afectarle la salud.
He aquí un resumen de los novedosos aportes de “Disfunción Nunca Más”:
- Presta una ayuda tanto a jóvenes como a adultos de 80 años o más que estén sufriendo de disfunción eréctil.
- Aporta conocimientos del aparato reproductor masculino, de sus órganos genitales internos y de sus órganos genitales externos.
- Habla de la importante conexión entre el cerebro y los centros nerviosos del pene.
- No recomienda medicamentos que puedan provocar problemas orgánicos. Menos aún recomienda experimentar con drogas compradas sin receta médica.
- No recomienda soluciones inaccesibles por su costo.
- No recomienda sustancias o elementos difíciles de conseguir.
- Las soluciones naturales están debidamente justificadas, indefectiblemente conducen a recuperar y aumentar el rendimiento sexual.
- ¡Y aporta un sinfín de secretos para potenciar el vigor sexual!
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¿Puedo confiar en “Disfunción Nunca Más” para encontrar una solución a mi problema de disfunción eréctil?
“Disfunción Nunca Más” nace de la preocupación de alguien que padeció el problema de la disfunción eréctil. Está escrito por una persona que conoce muy bien el tema, por lo que es una ayuda inestimable para todos aquellos que padezcan disfunción eréctil. En lo personal, puedo asegurar que logré los mejores resultados y en poco tiempo.
Cuando las erecciones se alcanzan sin problemas uno no es consciente de todo lo que influye para que ello suceda. Parece un hecho sencillo, aunque para que una erección suceda intervienen hormonas, nervios, músculos, irrigación sanguínea. Y muchas veces se alcanza la erección y otras veces no, a pesar de los estímulos. O se eyacula antes de tiempo, salteándose el período de meseta, tan importante para gozar y brindar satisfacción a la pareja.
Sea cual sea el problema de disfunción eréctil, “Disfunción Nunca Más” tiene una palabra efectiva para poder revertir el problema para siempre. Muchos hombres que ya se sentían desalentados encontraron en estas páginas una solución a su problema de disfunción eréctil.
¿Cuáles Son Los Pro y Contra De “Disfunción Nunca Más”?
Comencemos por los “pro” de “Disfunción Nunca Más”, de acuerdo a mi experiencia y al testimonio de miles de hombres que probaron este sistema único:
- Revertir el problema de disfunción eréctil.
- Lograr erecciones duraderas, que alcancen un clímax satisfactorio.
- Lograr orgasmos más potentes.
- Disminuir el período refractario para poder alcanzar pronto una nueva erección.
- Alcanzar la mejor performance sexual.
- Rejuvenecer el cuerpo y la mente, incrementando la energía vital.
- El sistema contenido en “Disfunción Nunca Más” no recomienda soluciones complicadas, que cueste llevar a la práctica.
- “Disfunción Nunca Más” permite concentrarse en el placer y nada más que en el placer.
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Con honestidad, “Disfunción Nunca Más” tiene alguna que otra “contra”. A Saber:
- Poner en práctica las recomendaciones requiere de compromiso. No se puede tomar algunas cosas y descartar otras, porque todo es valioso para alcanzar resultados satisfactorios y duraderos.
- Hay que leer el sistema propuesto en “Disfunción Nunca Más” de la A a la Z, sin saltarse ningún párrafo. Si es necesario refrescar algún punto, hay que releer y grabarse en la memoria los conocimientos imprescindibles para revertir el problema.
- No hay que ser ansiosos y aguardar resultados inmediatos. Una vez que se hacen los cambios necesarios en el estilo de vida, los resultados positivos pueden comenzar a mostrarse a dos semanas de implementación del sistema (o antes).
- Y una última contra que podemos encontrarle a “Disfunción Nunca Más”, ¡es que puede llegar a aumentar los celos de la pareja! Cuando una mujer se siente plenamente satisfecha en la cama no quiere por nada del mundo perder a su amante. ¡Nuestra pareja comenzará a sentirse inquieta por cuanta mujer esté cerca!
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