Generalmente, los automóviles con transmisión automática son muy susceptibles a deterioros por cambios drásticos al momento de conducir. Y lo que mucha gente no sabe es que todo comienza en el momento mismo de sentarte y arrancar el carro.
Poner en marcha un vehículo automático es una acción aparentemente sencilla que, sin embargo, encierra una serie de pasos específicos que resultan cruciales para el buen funcionamiento y la preservación de la mecánica del automóvil.
Según especialistas en conducción, el proceso de iniciar el desplazamiento de un coche con transmisión automática incluye una secuencia que muchos conductores ignoran, pero que es esencial para garantizar tanto un arranque suave como la longevidad del sistema de transmisión del vehículo.
A continuación explicamos cuál es la forma correcta de arrancar un vehículo automático, y así prevenir riesgos futuros como reparaciones o accidentes.
Cómo arrancar correctamente un carro automático
El procedimiento correcto para arrancar este tipo de coches comienza, primeramente, con el encendido del motor mientras se mantiene presionado el freno.
Acto seguido, es recomendable cambiar la transmisión de park (estacionamiento) a neutro, con el fin de desbloquear la caja de cambios. (ESTE, POR EJEMPLO, NINGUNO DE NOSOTROS EN EL EQUIPO DEL DIARIO LO HACÍA).
Después de este importante paso, se debe cambiar a drive (conducir) antes de iniciar el movimiento. Aunque podría parecer un conjunto de acciones menudas, estas recomendaciones tienen por objetivo optimizar la experiencia de conducción y asegurar el adecuado mantenimiento del vehículo a largo plazo.
Qué no hacer al arrancar un carro automático
Una práctica común pero inadecuada entre los conductores de automóviles automáticos consiste en cambiar directamente de park a drive sin hacer una parada en neutro.
Esta acción puede acarrear consecuencias negativas para el sistema de transmisión a largo plazo, debido a que forzaría a los componentes internos del vehículo a ajustarse bajo condiciones no ideales, incrementando el estrés en la maquinaria.
La secuencia sugerida por expertos permite, por el contrario, que estos componentes se ajusten de manera adecuada, evitando esfuerzos innecesarios y contribuyendo a la preservación de la transmisión.
Además, los expertos recalcan la importancia de realizar ajustes previos al arranque como la posición del asiento y la configuración de los espejos retrovisores. (ADEMAS, TE AHORRAN GASOLINA, QUE BIEN CARA ESTÁ).
Tales preparativos son fundamentales para asegurar una conducción segura y confortable, permitiendo al conductor mantener el control total del vehículo y una visibilidad adecuada en todo momento.
Qué otras recomendaciones hay al conducir un carro automático
En primer lugar, conducir en condiciones que propician el sobrecalentamiento del motor y, por ende, de la transmisión, puede ser perjudicial.
Esto incluye evitar la carga excesiva del vehículo y el uso intensivo en condiciones de mucha pendiente o temperatura alta. Mantener el sistema de refrigeración del vehículo en buen estado es esencial.
También, al cambiar entre ‘drive’ (conducir, manejar), ‘reverse’ (marcha atrás, reversa) y otras posiciones, es importante asegurarse de que el vehículo esté completamente detenido, debido a que cambiar de marcha mientras el coche está aún en movimiento puede causar daños severos a la transmisión.
Del mismo modo, acelerar gradualmente y evitar frenados bruscos favorece la vida útil de la transmisión automática. Conducir de manera agresiva puede incrementar el desgaste de los componentes internos.
Asimismo, cualquier anomalía como cambios de marcha bruscos, vibraciones inusuales, o el retraso en la respuesta de la transmisión debe llevar a una inspección profesional. Detectar y solucionar problemas temprano puede evitar reparaciones más costosas.
Qué factor determinante puede reducir daños en tu carro automático
Los expertos resaltan que el conocimiento es el principal factor para no sufrir daños al conducir un auto. El panorama actual de la automoción y la evolución tecnológica en los vehículos automáticos introducen dinámicas aún más complejas en lo que respecta al arranque y la conducción.
Por esto, familiarizarse con el manual del usuario proporcionado por el fabricante es fundamental. Este contiene información específica sobre los cuidados recomendados para el modelo en particular, incluyendo aspectos como los intervalos de servicio y el tipo de aceite de transmisión adecuado.